
Ligero y portátil: Por qué importa el peso
Los envases flexibles son mucho más ligeros que las opciones tradicionales, como el vidrio o el metal. Esto no sólo hace que sean más fáciles de transportar, sino que también reduce el consumo de energía durante el transporte: mejor para usted y mejor para el planeta.

Ahorro de espacio y practicidad: Más espacio para lo importante
En comparación con los envases rígidos, los envases flexibles utilizan mucho menos material y ocupan menos espacio. Es fácil de almacenar, se adapta a varios productos y maximiza el almacenamiento en su frigorífico, armarios y bolsas de la compra.

Frescura y vida útil: Inteligencia contra el desperdicio de alimentos
Gracias a sus innovadoras propiedades barrera, los envases flexibles mantienen los alimentos frescos durante más tiempo. Esto no sólo preserva el sabor y la calidad, sino que también ayuda a reducir el desperdicio de alimentos, lo que beneficia tanto al medio ambiente como a su bolsillo.

Higiene y seguridad: Envasado limpio, protección inteligente
Los envases flexibles no sólo son prácticos, sino también higiénicos. Protegen el contenido de elementos externos como el aire, la humedad y los gérmenes. Muchos envases flexibles ofrecen la posibilidad de volver a cerrarse, lo que facilita un almacenamiento limpio y sencillo.

Elección ecológica: Menos uso de recursos, más sostenibilidad
Al utilizar menos material y pesar menos, el envase flexible ayuda a reducir su huella medioambiental. Su producción requiere menos materias primas, lo que lo convierte en una alternativa más ecológica que los envases rígidos.





Preguntas frecuentes
¿Por qué los envases flexibles son más ligeros que la mayoría de los envases rígidos?
Los envases flexibles están hechos de capas finas de materiales como plástico, papel o aluminio, diseñados para envasar productos de forma segura sin material innecesario. Esto los hace más ligeros que las opciones rígidas como el vidrio o el metal, lo que facilita su manipulación, reduce los costes de transporte y disminuye el consumo de energía durante el envío.
¿Cómo ayudan los envases flexibles a prolongar la vida útil de los alimentos?
Los envases flexibles ofrecen excelentes barreras contra la humedad, el oxígeno y la luz, que a menudo hacen que los alimentos se estropeen más rápidamente. Gracias a las propiedades especiales de estos envases, los alimentos se mantienen frescos durante más tiempo, lo que ayuda a reducir el desperdicio de alimentos y a utilizar los recursos de forma más eficiente.
¿Cómo ahorran espacio los envases flexibles?
Los envases flexibles pueden adaptarse a la forma y el tamaño del producto que contienen, ocupando menos espacio que las alternativas rígidas. Esto hace que el almacenamiento sea más eficiente, tanto en casa como en los supermercados, y permite un transporte más compacto, reduciendo el volumen de carga y las emisiones.
¿Cómo mejora el envasado flexible la higiene alimentaria?
Los envases flexibles pueden proporcionar una barrera a medida que proteja los alimentos de factores externos como el oxígeno, la humedad y los gérmenes. Estos envases sellados garantizan que los alimentos permanezcan intactos y seguros hasta su consumo, lo que es especialmente importante en el caso de los productos perecederos.
¿Son los envases flexibles realmente más ecológicos que otros tipos?
Los envases flexibles consumen menos energía y materias primas tanto en la producción como en el transporte que los envases rígidos. Su menor peso y volumen contribuyen a mejorar su perfil medioambiental. Muchos envases flexibles son ahora reciclables, y las continuas innovaciones mejoran su sostenibilidad.
¿Pueden utilizarse envases flexibles para todo tipo de productos?
Sí, los envases flexibles son muy versátiles y pueden adaptarse a una amplia gama de productos, desde alimentos y cosméticos hasta productos industriales. Sus cualidades personalizables, como la durabilidad, la protección y el diseño, lo hacen adecuado para casi cualquier aplicación.